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Una comunicación sin inclusión. miradas sobre la prensa, el periodismo y la libertad de prensa.

Alza Tu voz. No siempre somos lo que pensamos.
Somos lo que hacemos, lo que decimos, sobre todo lo que no decimos. Alza Tu voz.

Hoy es el Día Internacional de la Libertad de Prensa. Las Empresas nos han robado la buena prensa, por eso reafirmo estos conceptos de Arturo Jauretche:
“Lo que quiero dejar aquí señalado es que nada hay más engañoso que la prensa llamada independiente” Cuando el estado ejerce censura por lo general se conoce, cuando se lee la prensa partidaria se sabe a que tendencia responde “Pero no ocurre lo mismo cuando el órgano de difusión se disfraza de independiente”.
A medida que la población toma conciencia que la que se autodenomina “prensa libre” no es tal, sino que está condicionada por intereses comerciales, comienzan a prestigiarse los diarios pequeños, el volante fotocopiado, los libros que no están sostenidos al aparato de difusión, la conferencia en un barrio, hoy podríamos incorporar a muchos sitios en Internet que bregan por hacer conocer la información silenciada en los grandes medios

Vivimos una situación inédita, un creciente uso de medios tecnológicos, ¿acercan a las personas o las alejan?, ¿comunican y aíslan?, depende como se quiera ver, es un debate que viene de lejos pero que en estos tiempos de medios hegemónicos se intensifica en toda la región y la función social de estos medios se tornan una cuestión que deberíamos al menos darle un tiempo de reflexión.
Una comunicación que avanza por efecto de la competencia entre las tecnologías de los países más industrializados, nos pone indudablemente como ya hemos señalado frente a una situación nueva a las sociedades, por lo tanto a las culturas de todo el mundo. Ahora bien, esto también produce otros efectos dignos de un análisis más amplio.

Podríamos mencionar, que esta universalidad cultural nos enfrenta a la posibilidad de tener “un mundo” (o una imagen de él) en nuestro hogar, la Tablet o en el teléfono que evidentemente deja afuera a un montón de personas, sociedades y países de los cuales nada sabemos...la pregunta que no nos hacemos es: existen otros países otra realidad además de la mía?
Los medios de comunicación, en especial la televisión, la Prensa y ahora Internet con todos sus soportes y sus forma de comunicar a través las distintas comunidades sociales gozan de una credibilidad muy alta en las personas, ¨ha… si lo dice la tele… está en la red… hay un sitio que dice, está en Wikipedia!!!
Pareciera entonces que tener información de otros países no fuera necesaria, lo paradójico es que no somos nosotros los que tomamos esta decisión.
Sabemos más de EEUU, Europa y ahora un poco de Asia (por los conflictos con EEUU), que de nuestros propios países limítrofes. África...es un continente ausente de las informaciones diarias en Latinoamérica.
Recordemos:
"Comunicación, cultura, educación… son tres realidades con una relación entre sí de la que depende el presente y el futuro de nuestra civilización llamada a expresarse con plenitud creciente en su dimensión planetaria" (Mons Ysern)
Por lo tanto esta situación de una información que va en un solo sentido en el campo regional, nacional, internacional y muchas veces en lo local, nos pone frente a otro desafío, el derecho que todos tenemos a la información y a comunicarnos.
El monopolio de la información, tanto de parte de los gobiernos como de parte de intereses privados, permite el uso arbitrario de los medios de información y da lugar a la manipulación de mensajes de acuerdo a intereses sectoriales. Es particularmente grave el manejo de la información que sobre nuestros países o con destino a los mismos, hacen empresas e intereses transnacionales. (1980 - doc Puebla 1071).
Es importante complementar este derecho a comunicar con el derecho a ser informados, más que oponer ambos derechos debemos complementarlos ya que en esencia uno le pertenece al otro, mientras unos es más globalizante de todo el fenómeno comunicativo del hombre, el otro es más específico de las función informativa, perteneciente a la dimensión conceptual de la persona en cuanto lo social y personal, lo que nos permite el conocimiento de los hechos y la comprensión del mundo.
Además este derecho se acerca de forma especial a aquellos que ejercer dicha función informativa en la sociedad, aunque no es exclusiva de estos sino también del destinatario.

"La información, es una función social en la medida en que garantiza y respeta la efectividad del derecho de cada ser humano a la información “ Pellegrini Silvia
"el derecho a la información es también un derecho social", por lo tanto la función pública de la información (periodistas - empresas periodísticas, etc.) está referida constantemente al derecho humano a la información (de las personas), del que habrá de partir y al que habrá que servir. El derecho a la información estará presidido por la idea de que su ejercicio se legitima solamente en función del bien de la comunidad" (Desantes, José Maria)

"La estrategia de dominación transnacional procura imponer a nuestros pueblos los hábitos, los valores y las costumbres que neutralicen su voluntad de cambio. La información y la comunicación tienen un rol preponderante en la estrategia de dominación. Los medios masivos no son utilizados como un bien social sino como negocios mercantiles de una minoría, y sus mensajes pretenden, en lo esencial, afianzar los valores establecidos y neutralizar en el pueblo la voluntad de cambio. Los flujos internacionales de información son controlados directamente por unos pocos centros de poder mundial, impidiendo que todos tengan la oportunidad de hacer oír su voz.
Todo lo que se relaciona con la comunicación es fundamental para la Iglesia, porque "la comunicación como acto social vital nace con el hombre mismo" (Puebla1064) y enriquece su vida personal y colectiva" (SEMINARIO LATINOAMERICANO "IGLESIA Y NOMIC")

Es digno indicar que todas estas reflexiones están cumpliendo 30 años. Sin embargo vuelven como a nosotros como si en vez de superar las barreras de la incomunicación nuevamente quisieran envolver a nuestro continente entre las tiniebla de la “teoría de los dos demonios” en donde las dictaduras de nuestro continente cometieron las atrocidades más despiadadas en contra de su pueblo y sus democracias.
Hoy vuelven con un formato distinto pero en donde su reivindicación de clase son exactamente las mismas, esa sociedad civil cómplice de las dictaduras, sus genocidios y violaciones a los derechos humanos.
No tuvieron límites a la hora de “desaparecer” a muchos civiles, periodistas, sacerdotes, obispos y jóvenes de nuestras comunidades, de apropiarse no solo de sus niños, sino en muchos casos de empresas y de los recursos de los estados.
Que no sea un engaño para desatar la violencia, tras el manto de una prensa cómplice con gobiernos que vuelven a sumir en la pobres a nuestros pueblos y una justicia ciega presa de intereses egoísta que solo piensa en “su poder tener”.
Una comunicación que nos haga más comunidades posible y existe en los miles de pequeños medios comunitarios, radios, TV, productoras y periodistas que día a día muestran la realidad cotidiana de la gente, a ellos habrá que apoyar par que la libertad de prensa deje ser de una o dos empresas y seguir creyendo que “a esta democracia la mejoramos con más democracia” para que la dignidad de cada persona deje ser una utopía y comience a ser una realidad.

caminantes

comunicacion, periodismo, derecho a la información, libertad de prensa